Descubriendo el hilo negro:
Nos volverán a mandar a la chin...
Manuel Solís Vázquez.
Históricamente la Región Lagunera jamás ha contado con el impulso gubernamental para alcanzar un desarrollo armónico y continuo, a diferencia de las capitales de las entidades federativas que dicen gobernarnos.
Asi Torreón y Gomez Palacio son mencionadas hasta el cansancio en los discursos políticos de candidatos sin memoria y sin talento, campaña tras campaña, gobierno tras gobierno, como ejemplos de pujanza y esfuerzo, habitados por hombres recios y orgullosos que merecen un mejor futuro.
Y como siempre el futuro y el desarrollo se quedan pendientes hasta la próxima campaña, en que aparece otro político enano que vuelve a burlarse y a prometer ahora si y de aquí en delante, la transformación y el rumbo que eternamente hemos merecido, pero que nunca llega.
Y mientas tanto Durango y Saltillo crecen y crecen, se embellecen y desarrollan, planeación, capital e inversión, igual a desarrollo, crecimiento y proyeccion. Centros históricos majestuosos, abolengos centenarios, burocracias y estirpes nobiliarias, servicios públicos de excelencia, dueños de cultura, alcance, visión y dueños también del gobierno.
Los laguneros son buenos, nobles, decentes, respetuosos, solidarios, institucionales, priistas generacionales y santistas, votan hoy como ayer, igual que los abuelos y los padres, aplauden, cantan y ondean banderas, quieren credenciales, fotos y recuerdos, son busca chambitas de tercera.
Los únicos dotados para operar, coordinar, distribuir, gobernar y definir destinos son los capitalinos, ellos juntan y gastan los dineros, ellos elaboran y ejercen presupuestos, ellos deciden y marcan línea.
Nosotros votamos y callamos, nosotros aceptamos y reculamos. Las inversiones importantes, las grandes empresas y factorías, la creación del empleo calificado debe instalarse en las capitales, nosotros estamos para contar muertos y echar porras a los candidatos, memorizando fechas de crímenes sanguinarios que nos convierten en noticia nacional.
Por eso debemos reconocer la capacidad y talento excepcional de los duranguitos que velando por el bienestar y la seguridad de los habitantes del terruño “Cuna de la Revolución”, pretenden beneficiarnos con una obra majestuosa que según ellos nos llenara de orgullo, edificando un centro penitenciario de alta seguridad, porque nuestro municipio se conoce a nivel mundial gracias a las acciones que se realizan en el CERESO.
Sucesos comentados incluso por Carlos Fuentes como ejemplo de la corrupción y la violencia, amparada por funcionarios públicos como la ex directora del penal lagunero, que permitía delinquir a los internos, siendo incluso laureada como la mujer del año en el sexenio anterior.
Muchas gracias señor gobernador constitucional del estado de Durango, don Jorge Herrera Caldera por su visión de hombre de estado que resuelve de tajo el problema del empleo en la región. Qué importa que la inversión aquí sea nula, gracias a ustedes, nuestros hijos licenciados de las universidades regionales tendrán trabajo, construyendo un penal que será único en México.
Qué importa que los jóvenes abogados, psicólogos, médicos, ingenieros, contadores o profesores no ejerzan, ya que podrán ser excelentes ayudantes de los maistros albañiles y con suerte se titularán también, como medias cúcharas o se convertirán en choferes, jardineros o empleados domésticos de las familias pudientes que llegaran a vivir a nuestras ciudades, para estar cerca de sus internos, y tal vez y con mayor suerte lleguen a ser guaruras de sus esposas y colabo- radores y hasta huéspedes de tan majestuosa fortaleza.
Como hacen falta líderes o alcaldes como unos tres que algún día tuvimos, con personalidad y carácter para oponerse a las decisiones estúpidas de los gobernantes capitalistas miopes, a quienes La Laguna no les importa absolutamente para nada. Por cierto ¿Dónde andarán los represen- tantes populares? ¿Qué opinarán los señoritos sordomudos? los ilustres ignorantes que ni hablan, ni escuchan, pero bien que cobran.
¿Será tan difícil adivinar, que si tan buena obra fuera, ya la hubieran inaugurado en Durango y que nosotros por ninguna circunstancia aceptamos que se construya aqui?
No cabe duda que nos ven como sus pendejos. Señores gobernantes tapaderas de sus antecesores, a ver si nos entienden, a ver si su extraordinaria capacidad e inteligencia, a ver si su enorme sensibilidad y conciencia politica, a ver si su elevadísimo coheficiente intelectual les permite entender esto:
No, no, no, nadie, absolutamente nadie, quiere un nuevo penal aquí.
Aunque nosotros con muchisimas carencias intelectuales y de raciocinio, basados en hechos históricos-científicos y descubriendo el hilo negro podremos confirmar que hoy, como ayer y como siempre, nos volverán a mandar olímpicamente a la chingada.
|